Espíritu de la Navidad...

Queridos amigos:
Hace cuatro años escribí un artículo sobre el Espíritu de la Navidad y aprovecho para retomarlo con los ajustes del momento...

Influjo cósmico de la entrada
del Sol en Capricornio

Aprovecho desde ya para desearles a todos una FELIZ NAVIDAD y que el 2016 sea un año lleno de cosas maravillosas.
He estado pensando en la posibilidad de ofrecer un pequeño taller para esta fecha online y he decidido en su lugar brindarles lo que hago en esta fecha.  Si quisieras que te ayude o quieres alguna guia más personalizada con gusto te atiendo via telefónica o por skype, previa cita.  Puedes escribirme a elitepperk@gmail.com para concertar una cita o para más información.
Pero... hablemos ahora del Espíritu de la Navidad.
Desde tiempos ancestrales hemos celebrado el Solsticio de Invierno para los que vivimos al norte del Ecuador y de Verano, los que viven al sur.  Fecha de celebraciones, de revisar lo que hemos logrado, lo que deseamos para el año entrante.
Con la entrada del Sol en Capricornio, pareciera que el planeta se detuviera por un tiempo para ver como nace de nuevo el Sol.  Los que vivimos en el norte observamos como los días se vuelven más y más cortos... hasta que llegamos este año, al 22 de diciembre, a las 4:48 UTC (5:48 España) y el Sol comienza a reinar de nuevo, los días comienzan a ser más largos, y así vamos, un nuevo ciclo, un nuevo año!

Hay muchas leyendas que cuentan que San Nicolás, ese hombre sabio que de forma silencio y anónima regalaba dulces y comida a los niños.  Santa Claus, en su carroza voladora que reparte juguetes a todos los niños del mundo en una sola noche... y el Niño Jesús, a quien los Reyes Magos trajeron regalos y que hoy es ese niño que está en casa esperando su presente.  Y recordamos a los niños haciendo cartas a Santa, al Niño Jesus, a los Reyes Magos haciendo sus peticiones desde el alma, con inocencia y sobre todo, con fe.  De forma intuitiva, los niños practican lo que los adultos hoy llaman La Ley de Atracción... piden lo que quieren, y lo hacen de forma clara y precisa: un hermano, el juego x, la bicicleta, que su mamá sea feliz, que su papá tenga buena salud...
Siempre en positivo:  La mente maravillosa crea imágenes a partir de nuestras palabras y pensamientos.  Así que cuando, por ejemplo, pienso que quiero verme sana y feliz, la imagen que creo de mi misma es esa: una mujer sana y feliz.  Si por el contrario, me digo: no quiero enfermarme ni estar triste.  ¿Cuál es la imagen que recibe mi mente?  ¡Exacto!  La de una mujer enferma y triste.  Por eso es que esta es la primera de las reglas para pedir lo que sea... pide lo que quieres!!!  Permite que tu mente haga una imagen clara de tu deseo y luego suéltala.
¿Cómo la sueltas?
Pues... la forma más linda de hacerlo es escribiéndola.  Deja que tome forma en el papel y guárdalo, o quémalo, o colócalo en un globo, o...
Desde hace unos años se ha popularizado en algunos países la celebración del Espíritu de la Navidad como un día especial para hacer nuestras peticiones a esa figura que consideramos más grande que nosotros, que es capaz de ayudarnos a hacer que nuestros sueños se hagan realidad.  Es una fecha especial, ya lo vimos astrológicamente por la entrada del Sol a Capricornio y ancestralmente, porque hemos celebrado desde siempre eventos especiales alrededor de esta fecha: el nacimiento del Niño Dios, Saturnalia antes de eso, Januká, la Fiesta de las Luces y los milagros.
La fecha y la hora varían de acuerdo con la entrada del Sol a Capricornio, que como ya mencionamos este año es el 22 de diciembre, a las 4:48 UTC.  Algunos toman esa hora exacta para hacer sus peticiones, otros lo hacen siempre el 21 de diciembre, en fin lo importante es la intención.
Hay diferentes formas de celebrarlo:
Con amigos, familia o solos.
Con comida, bebidas o en reflexión solitaria.
Con meditación o sin ella.
Tu decides cómo lo quieres celebrar.  Comparto contigo lo que más me gusta, después de experimentar varias modalidades.
Antes de comenzar:  Agradece todo lo que recibiste este año.  ¿Tienes tus peticiones del año? Revísalas.  Agradece.  ¿No las tienes?  Reflexiona por todo lo que has recibido y aprendido.
Quieres prepararte física, emocional y espiritualmente.
Físicamente:  Prepara el espacio, decóralo con temas navideños, estrellas, borlas, cintas.  Ten a mano papel (yo prefiero hojas blancas), bolígrafos, marcadores, rotuladores, colores, y cualquier otra cosa que quieras utilizar, quizá esa pluma tan especial.  Prepárate tu: ese día cuando tomes tu baño, hazlo de forma consciente, te estás preparando para un momento especial.  Prepara un pequeño espacio en el que tengas presente los cuatro elementos de la naturaleza: fuego, agua, aire y tierra.  Puede ser una vela para el fuego, un vaso con agua para el agua, en el que puedes colocar una flor para la tierra, una pluma o incienso para el aire.
Emocionalmente: Mientras te preparas tú y tu entorno físico, te vas preparando emocionalmente, dedicando ese día intencionalmente a la celebración del Espíritu de la Navidad.
Espiritualmente: Ese día puedes dedicar unos minutos a meditar, a poner tu mente y tu alma en blanco para vaciarte de cualquier prejuicio. 
Una vez terminadas tus peticiones, puedes también hacer una breve oración... "Lo entrego al Espíritu! desde el amor, desde la paz para el bien mio y de todos los que se vean afectados por mis deseos!"

Continuará....